AUTOINSUFICIENTE

Fui a una fiesta. No tome nada. Me terminé un paquete entero de Halls sabor sandía pero no logré que se me suba a la cabeza. Eran las dos de la mañana y una chica se despdió de mí diciendo "Hola". "Chao" le dije yo casi al mismo tiempo mientras ella salía por la puerta diciendo: "No nos presentaron soy Marta". "Pancho" le dije, soltándole la mano. Ya no quedaba casi nadie, así que salimos de ahí con mi amigo P... "¿Tienes hambre?" me preguntó. Le dije que no, pero terminamos yendo hacia unos hot dogs en La Zona. Es la primera vez que piso ese lugar en mucho tiempo. Mi amigo no me ha visto en casi medio año, no sabe nada de mi última operación y tampoco le quiero contar. Damos la vuelta a la manzana, un travesti se dirige a mis genitales y yo trato de esquivarlo lo mejor que puedo ayudado de mi muleta. Compro otro paquete de Halls de sandía. P... compra un tabaco. Volvemos al auto y nada en mi cuerpo se queja.
Encuentro mi billetera en el suelo, me la guardo en el bolsillo y abrocho el botón. "Vamos a un putero" le digo a mi amigo en broma. "Si quieres vamos a un show" me dice. Ambos nos quedamos en silencio un rato y luego de ver que ya ni hay gente en las calles, volvemos a nuestros hogares. Me despido de él con un abrazo cuando me deja en mi casa.

Me conecto y no hay nadie en el chat. El único mail que tengo es de una pagina de internet que me manda chistes a diario. Prendo la tele. La mejor opción son los infomerciales nacionales. Me siento ahí sabiendo que tampoco quiero ver eso. Apago la televisión y siento que es una de esas estúpidas veces en las que la soledad empieza a pesar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

que fue naco.. estoy apestado...
Asoma para pegarnos un trago.. de jugo de naranja...