LECCIÓN DE ESTILO

Uno nunca espera que suceda que el taxista sea la taxista. Y que la señora escuche Mozart. Eso solo pasa en las películas, porque no pagamos la entrada para ver lo que vemos todos los días. Sin embargo sucede que la carrera del taxi me costó menos que una película en martes loco, y conocer a la señora me hizo saber que uno no pierde el estilo por las cosas que hace o por lo que se convierte, siempre queda la posibilidad de ser o hacer cualquier cosa a tu manera. Para crear un estilo solo necesitas convertirte en tu mejor fan, todo lo demás es secundario.