Necesitaría varios tomos impresos y unos cuantos megabites para defender el derecho a no definirme. Resulta complicado explicar que no se necesita explicación. Mientras el equilibrio de la naturaleza se basa en el cambio constante, el ser humano se empeña en encerrar ideas y aferrarse a principios sólidos e instituciones inamovibles. Creer en algo y defenderlo con tu vida conlleva un riesgo: podrías estar equivocado.
Yo no soy nadie, espero no serlo nunca. Capricho y necesidad... estos dos motores llevan la vida adelante. Empiezo a escribir creyéndolo necesario y termino pensando que es un capricho inútil. Ciertos momentos son tan fugaces que no hace falta prestarles atención. Hasta la próxima.
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